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I.-INTRODUCCIÓN.-
Expresàbamos en el artículo anterior ...”La Cumbre de Guadalajara (México) constituyó el punto de arranque en la conformaciòn práctica de un espacio comùn iberoamericano, integrado por los países soberanos que hablan español y portugués en América y Europa.- Que ese “espacio comùn iberoamericano” que desde los inicios de la “transición democrática en España” se denominó “Comunidad Iberoamericana de Naciones” a efectos de distinguirlo del proyecto de Hispanidad y de Comunidad Hispánica de Naciones que el franquismo desde sus planteos hegemónicos, había tratado de hacer realidad a raíz de su triunfo en la Guerra Civil española, existía mucho antes.- Desde el principio del siglo XIX con la independencia de las colonias españolas y portuguesa en el continente americano, aparece “esa idea en el pensamiento español y americano”, hundiendo sus raíces en la historia de las relaciones entre España, Portugal y América y en los intereses y vínculos de todo tipo que se habían ido fraguando a lo largo de los siglos hasta llegar a nuestros días.
…Que esas raíces se sustentaron y sustentan en la existencia de una serie de realidades que unen o aproximan a España y Portugal y a los países latinoamericanos de habla española y portuguesa, existiendo al respecto como reseña Celestino Arenal en su trabajo: …“una serie de vínculos e intereses comunes de la más variada naturaleza entre los países de lengua española y portuguesa de ambos lados del Atlántico que conforman un espacio común iberoamericano.- Esas realidades comunes son en parte de naturaleza histórica por cuanto se han fraguado y afirmado a lo largo de varios siglos de convivencia común y de casi dos siglos de independencia mutua.- Hablamos principalmente de la historia, la lengua, la cultura, los valores comunes y también del importante entramado de vínculos. Intereses y relaciones comunes, políticas y económicas, sociales y culturales que se han desarrollado a partir de la independencia de la América Ibérica.- Realidades de naturaleza histórica, especialmente a nivel lenguístico y cultural que sin embargo continúan plenamente presentes y en proceso de expansión demandando la atención del conjunto de los países iberoamericanos”.-
….Que estas realidades comunes, son por otro lado, una medida cada vez más importante “de naturaleza actual” como consecuencia del espectacular desarrollo que han conocido las relaciones mutuas en el último cuarto de siglo XX y principios del XXI en los planos políticos, económico, social y cultural como consecuencia principalmente de la intensificación y profundización de las relaciones político diplomáticas. Del impresionante desarrollo de los flujos económicos y principalmente de inversión de los cada vez más intensos lazos culturales y sociales que se derivan de los flujos migratorios que se han producido entre los países iberoamericanos de las dos orillas del Atlántico.- Si antaño fue la emigración española a América la determinante de los lazos, hoy es la emigración latinoamericana a España la que contribuye de manera decisiva a incrementar los vínculos”.-
Que por lo tanto, este espacio geográfico, que comprende un conjunto de realidades comunes, históricas y actuales, es el que permite considerar la existencia de una Comunidad Iberoamericana de Naciones, de un “espacio común iberoamericano” que tiene no solo intereses comunes específicos que es necesario atender, sino también, señas de identidad comunes y propias en el actual escenario mundial”.. que debemos “afirmar y que permiten y deben permitir su protagonismo activo a nivel internacional”.-
II.- BREVE REFERENCIA AL PAPEL DE LAS CUMBRES IBEROAMERICANAS DESDE SUS ORIGENES HASTA NUESTROS DÍAS.-
Se considera que el fin de la guerra frìa importó el ingreso a partir del año 1990, a una coyuntura marcada por el optimismo en el futuro armónico de la humanidad, reflejado, conforme señala Malamud en su trabajo:…”en las posibilidades del diálogo como camino para la paz y en un renovado impulso del multirateralismo”.- Fueron los años en los que se firmaron los acuerdos de Oslo y que provocaron el fin del apartheid en África del Sur.- También y desde una perspectiva más estrictamente latinoamericana, el tiempo en el que se consolidaron los procesos de paz en América Central, comenzando por Nicaragua y el Salvador y concluyendo algo más tarde en Guatemala.- A esto hay que agregar la generalización de las transiciones a la democracia en la región, un proceso del que sólo se quedó fuera Cuba y en alguna medida, el ciclotímico Haití.- Si a esto le agregamos el fin de la “década perdida” y el comienzo de una etapa de crecimiento económico, resulta perfectamente entendible el hecho de que se mirara el porvenir con franca alegría y con grandes expectativas de futuro.- Desde una perspectiva internacional el fin de la Guerra Fría facilitó la vinculación de América Latina con nuevos actores internacionales extrarregionales a la vez que un mayor protagonismo de los Gobiernos y los Estados Latinoamericanos en la solución de sus propios conflictos, como prueba el protagonismo del Grupo Río en América Central y en otros conflictos regionales.- Por su parte, la eclosión de las transiciones había provocado una profunda revalorización de la democracia como sistema político más apreciado por la mayor parte de lo latinoamericanos” (Malamud, Carlos: “Las Cumbres Iberoamericanas en el actual escenario mundial”; en: “Las Cumbres Iberoamericanas (1991-2005): Logros y Desafíos”; Celestino del Arenal (Coord); Ed. Fundación Carolina y Siglo XX, set 2005, pág 29).-
Por su parte, considera Freres en su trabajo, lo que consideramos esencial considera…. “que el origen de las Cumbres Iberoamericanas no representa la culminación de un proceso “natural”, sino una “conjunciòn de voluntades de los gobiernos de los países iberoamericanos”.- Dicho de otra manera, la Comunidad Iberoamericana no es un espacio preexistente (salvo quizás en la mente de algunos ilustrados) sino, que se crea con el tiempo y con la pràctica, donde las Cumbres constituyen una herramienta clave”.- A diferencia de las Cumbres de la Unión Europea (reuniones del Consejo cada semestre) y de las Cumbres de las Américas, que se fundamentan en la vecindad de sus miembros, o el Foro Asia Pacífico de Cooperación Económica (APEC) a un lado y otro del Pacífico que persigue intereses económicos, esta comunidad se basa sólo en lazos históricos y culturales.- Se distingue tambièn de las comunidades anglófonas y francófonas que en esencia, constituyen la extensiòn de sistemas coloniales en la època contemporànea, porque en el caso iberoaméricano las antiguas metrópolis y colonias llevan al menos cien años sin tener una relaciòn de dependencia o subordinaciòn directa”.-(FRERES. CHRISTIAN: “La corta historia de las Cumbres 1991-2004” en Las Cumbres Iberoamericanas (1991-2005): Logros y Desafíos”; Celestino del Arenal (Coord); Ed. Fundación Carolina y Siglo XX, set 2005, pág 6).-
Lo importante a considerar, es que el origen de las Cumbres Iberoamericanas, tuvo su razón de ser en la necesidad de las partes conformantes, de dar forma a un ámbito que como reseña Freres, tiene asidero en lazos “..históricos y culturales”.- (FRERES, C: ob. Cit pág 6)
Si bien algunos autores, entre ellos el autor en análisi, consideran que “ese interés “ existente al momento de la suscripción del acuerdo de generar las Cumbres Iberoamericanas, fue un interés desigual, en atenciòn a ser mayor por parte de España, no podemos ser ajenos a una realidad, y es que al momento de suscribir “ese acuerdo de creaciòn de las Cumbres” los representantes de los países firmantes, los países de América y Portugal también ganaban con la conformaciòn de dicho espacio de lo contrario, no lo hubiesen consentido.- No se invierte tanto esfuerzo polìtico ni económico solo “por estar”.-
Si para España, como expresa Freres. “las Cumbres Iberoamericanas constituyen un instrumento clave de la construcciòn de un papel propio en la escena internacional”, los países Latinoamericanos y Portugal poseen un interès especial tambièn y así debe ser, en razón de sus geografías, unidas oceánicamente, como lo grabara Cristobal Colón con sus viajes y sus anhelos, continuados y fortalecidos por lazos históricos, culturales, lengüisticos. económicos y religiosos que los hermanan.- Para los países latinoamericanos y para Portugal, la plataforma conformada importa una “plataforma internacional mediante la cual pudieron y “pueden” influir en el mundo en una relaciòn de cierta igualdad con socios del Norte “algo no replicable en ningún Foro”.- (Freres, C: ob. Cit pág 7)
Las Cumbres constituyeron y constituyen una “ventana potencialmente importante para llevar la voz de América Latina al sistema internacional, fortaleciendo aunque sea modestamente, su autonomía relativa”.- Es importante que no “dejen de observarse y de sentirse unidos, los unos a los otros, a punto tal que “sus identidades” “sumadas a sus intereses”, sean sus plataformas fundamentales para continuar, en especial hoy frente a los avances impuestos por la globalizaciòn económica.-
Qué habria sido de los países latinoamericanos oportunamente, si no hubiesen decidido estar junto a España, cuando EEUU los consideraba su patio trasero?.- No sirvió esa decisiòn para colocarse con màs peso en el contexto internacional de naciones? el que les ha permitido hoy poseer la importancia que han tienen y han adquirido y sentirse conscientes y orgullosos de ello?.- Y por su parte…habría ingresado España tan facilmente a la Unión Europea, sin tener el peso econòmico adquiridos, entre otros, por su relaciòn con América Latina y la estrategia conseguida en el contexto internacional de naciones gracias a ello?
Algo que no debemos olvidar hoy: si bien como expresa Malamud…”dentro del contexto general cada cual tiene sus intereses nacionales particulares”,….”para todos, los potenciales programas de cooperaciòn (que debemos recordar muchos de ellos fracasaron.- Según un informe interno de la SEGIB 103 fueron cancelados entre la V y la IX Cumbre y otros no sobrevivieron por falta de financiación) fueron útiles, sirvieron.- Tambièn se lograron realces internacionales a través de la organizaciòn de las conferencias internacionales y en definitiva, una vez iniciado el proceso con la Primera Cumbre celebrada en Guadalajara, Mèxico en el año 1991, nadie, quería quedar fuera, incluso, aún cuando tuvieron dudas a cerca de su “viabilidad práctica”.-
Es muy importante al respecto considerar que esta Primera Cumbre fue celebrada un año antes “del Quinto Centenario del encuentro entre España y Amèrica” decisiòn adoptada por las sensaciones negativas que podia conllevar el imaginario latinoamericano, si bien las positivas han sido muchas más.-
Este hecho tuvo relaciòn con el surgimiento de las Cumbres Iberoamericanas.- Los trabajos preparatorios comenzaron en 1983 para promover la cooperaciòn multilateral iberoamericana, y los actos preparatorios del V Centenario, lo cual fue muy importante, porque sirviò de base para tomar “mayor conciencia de la identidad latinoamericana” que comenzaba a resurgir, de la mano de las florecientes “nuevas democracias en Amércia Latina”.-
II-I.- La Cumbre de Guadalajara-México 1991.-
Expresaba Simòn Bolivar “Hemos arado en el mar” .- Expresaban los constituyentes de la Cumbre Iberoamericana en Mexico en 1991. en la Declaración de Guadalajara: “Representamos un vasto conjunto de naciones que comparten raíces y el rico patrimonio de una cultura fundada en la suma de los pueblos, credos y sangres diversos. A quinientos años de distancia de nuestro primer encuentro, y como uno de los grandes espacios que configuran el mundo de nuestros días, estamos decididos a proyectar hacia el tercer milenio la fuerza de nuestra comunidad”.-
Expresan Javier Surasky – Norberto E. Consani en su trabajo:…”la idea de las Cumbres Iberoamericanas, nacidas precisamente a partir de una serie de encuentros que tuvieron lugar con motivo del quinto centenario del descubrimiento de América, representa hoy la más firme actualización de la idea de una comunidad iberoamericana. El paso fundante de este nuevo encuentro tal vez se haya dado en 1991, cuando la Conferencia de Comisiones del Quinto Centenario dejó paso a la Conferencia Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, mejor conocida como Cumbre Iberoamericana, reunida en la ciudad de Guadalajara, México, los días 18 y 19 de julio. Como veremos, la Cumbre Iberoamericana no tardaría en asumir el compromiso de continuar y profundizar los lazos de cooperación que asumieron nuevos bríos con motivo de los trabajos conjuntos en razón del Quinto Centenario.
Este primer encuentro en Guadalajara del que participaron 21 Estados puso las bases sobre las que se estructurará luego todo el trabajo de las Cumbres Iberoamericanas, definiendo un verdadero “sentido estructural” del proceso de encuentros al más alto nivel que se iniciaba, definiendo qué tipo de relación se perseguía establecer entre sus participantes. El Primer punto de la Declaración de Guadalajara es suficientemente explícito al respecto: “Con beneplácito nos hemos congregado, por primera vez en la historia, para examinar en forma conjunta los grandes retos que confrontan nuestros países en un mundo en transformación. Nos proponemos, por ello, concertar la voluntad política de nuestros gobiernos para propiciar las soluciones que esos desafíos reclaman y convertir el conjunto de afinidades históricas y culturales que nos enlazan en un instrumento de unidad y desarrollo basado en el diálogo, la cooperación y la solidaridad”.- (SURASKY Javier y CONSANI Norbert: “Cumbres Iberoamericanas: arando tierra fértil”; Trabajo presentado ante el Instituto de Relaciones Internacionales Serie -Estudios Nª 19, nov 2001; Univ Nac de la Plata, Argentina-Facultad de Ciencias Juridicas y Sociales -Reg de la Propiedad Intelectual 65248, pág 3/56).-
Por su parte se ha expresado …”que con la I Cumbre Iberoamericana se inició un proceso por el cual los 21 Estados de lengua castellana y portuguesa de América y Europa han creado un instrumento político, que se ha dotado de una progresiva institucionalidad. ….En las dos primeras cumbres, que podrían llamarse fundacionales, elaboramos un conjunto de principios y de objetivos comunes, sobre la base de los elementos que definen la unidad, la riqueza en su diversidad y la identidad de los países iberoamericanos».- Las citas de Guadalajara (18y19de julio de 1991) y de Madrid (24de julio de 1992) definieron los elementos fundamentales de la Conferencia Iberoamericana. El trabajo diplomático para consensuar esta iniciativa estuvo determinado por el ejercicio de un liderazgo español, el cual, en esta etapa, asumió la forma de «liderazgo ejemplificador o pedagógico», caracterizado por la prudencia y una inspiración idealista, expresada en: a) España rehúye planteamientos sobre un mecanismo asimétrico, enfatiza la igualdad de todos los asistentes y realza la «naturalidad» de la relación multilateral iberoamericana». Por ello, se omite toda mención a una «identidad» histórica, cultural o jurídica, para reforzar la idea de la «pluralidad» de origen” .-
Se ha expresado, que durante los años ’90, este proceso ha ido paralelo a dos fenómenos: la presencia española en América Latina se ha ampliado, aunque ha conservado caracteres de parcialidad (desarrollo en ciertas áreas, ausencia en otras) e irregularidad (cercana respecto de ciertos países, lejanas respecto de otros)». Hasta hace pocos años, los lazos entre España y los países iberoamericanos se limitaban a la conservación de la herencia del pasado común o, por usar palabras del gran Borges, maestro de todos los hispanohablantes, a la conservación de ‘la pompa y la ceniza de los aniversarios’.
Igualmente, se ha producido un desarrollo de la «diplomacia de cumbres», expresada en la multiplicación de foros y mecanismos formales e informales de concertación y cooperación entre los Jefes de Estado y de Gobierno. En 1991, la Cumbre Iberoamericana era un ejercicio único; sin embargo, la ampliación del Grupo de Río, la aparición de las Cumbres Hemisférica, Sudamericana y Euro-latinoamericana y el desarrollo del MERCOSUR y países asociados, entre otros, han creado un paisaje diplomático determinado por la proliferación de este tipo de reuniones.
Debe destacarse la labor intelectual de Celestino del Arenal, quien había elaborado la tesis de la «comunidad de hecho» entre España y América Latina y de Yago Pico de Coaña, entonces Director General de Política Exterior para Iberoamérica, que intervino activamente en la negociación de la Declaración.-
Mucho se ha hecho desde Guadalajara, Mèxico en 1991.- Si consideramos las bases de las primeras dos conferencias, encontramos como puntos básicos lo siguientes: a) muy importante han sido tambièn los encuentros sectoriales del ámbito gubernamental y no gubernamental.- La Cumbre de Guadalajara puso su acento en el diálogo político y la concertación.- Madrid, se ocupó de la cooperaciòn.- b) crear un Mercado Común del Conocimiento y la Cultura», para lo cual se invita avanzar en proyectos relacionados con cinematografía, libro y restauración y conservación de monumentos. En este marco y junto con felicitarse por la puesta en marcha de los Institutos Cervantes y Camoens, la Cumbre aprueba los siguientes programas: a) Programa de Televisión Educativa Iberoamericana, a través del satélite Híspasat»; b) Programa MUTIS de cooperación universitaria y movilidad de posgraduados’P’ (que hoy deben revisarse a efectos de tornarlos mucho mas efectivos y con generación de menores gastos, para lo cual el intercambio entre instituciones la educaciòn utilizando las estructuras existentes y todo el capital humano es esencial); e) Programa de Apoyo a la escolarización básica y alfabetización de adultos; d) Fortalecimiento y continuidad del Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo-Quinto Centenario (CYTED_D)102 (revisar su continuidad hoy a traves de otros acuerdos firmados y que realmente sean efectivos, con menor gasto) y e) Apoyo a distintos programas de transferencia de tecnología (hoy fundamental).- f) En el campo del desarrollo social y humano, entendido como desarrollo sostenible, además de distintas iniciativas que se toman en relación con las áreas de la Seguridad Social, salud, medio ambiente y desarrollo social, destaca la firma del Convenio constitutivo del Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe, ya previsto en la Declaración de Guadalajara (se logró en estos años la operatividad necesaria?Con excepción del Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, estos programas correspondían a iniciativas españolas, asumiendo este país un papel protagónico en su gestión y financiamiento.- (Ver cómo hoy se pueden y deben sostener con inversiones propias en todo lo posible y con la ayuda necesaria en otros supuestos, logrando un gran control para evitar desvìo de fondos, evitando asi alta corrupción respecto de los mismos).- g) La Cumbre de Madrid también perfeccionó el mecanismo de concertación, reafirmando las normas generales de Guadalajara, particularmente la adhesión a la democracia representativa, el respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales y el desarrollo económico y social!». h) Al mismo tiempo, se incorporó la noción de que Iberoamérica tenía valores propios y participaba de valores universales (considerar que el hecho de la existencia de mayor voluntad politica, no requere necesariamente dejar de bregar por los mismos); i) El capítulo «Concertación Política» repasó los principales acontecimientos del sistema internacional y abordó cuestiones como el apoyo a Naciones Unidas y a la OEA, los avances en materia de desarme’!’, los progresos en América Central, y reiteró una posición común de lucha contra el narcotráfico y el terrorismo!». (Cabe considerar al respecto, que se dejò constancia de la entrada en vigencia del Tratado para la Proscripción de Armas Nucleares en América Latina y el Caribe, el Acuerdo argentino-brasileño sobre uso pacífico de energía nuclear, el Compromiso de Mendoza sobre proscripción de armas químicas y biológicas y la Declaración de Cartagena sobre renuncia de armas de destrucción masiva.
Además, se manifiesta la conveniencia de participar en la Convención sobre Armas Químicas. Punto 7 del Documento de Conclusiones de la II Cumbre Iberoamericana, en Ministerio de Asuntos Exteriores, Actividades, textos y documentos de la política exterior española. Afio 1992, op. cit., p. 1141 ).-J)También se adoptaron pasos conducentes a una mayor institucionalización. Se contempló una reunión anual de Cancilleres con ocasión de la Asamblea General de las Naciones Unidas!», y se estableció un mecanismo de consultas para casos de especial urgencia y relevancia!». K) Asimismo, se creó un grupo coordinador (que reemplazó la «troika» México-España-Brasil), indicándose que lo formarían México, España, Brasil, Colombia y Argentina.- L) Por último, como expresión concreta de concertación, la Conferencia Iberoamericana, en un ejercicio único, acordó rechazar todo tipo de interpretaciones que pretendan reconocer la posibilidad de la aplicación extraterritorial de las leyes de un país a otro, haciendo suya en este punto la Declaración del Grupo de Río.-
III.- LAS CUMBRES IBEROAMERICANAS HOY.-
Ahora bien, alcanzan hoy los principios que las sostienen, atento la diversidad de asistentes en el espacio al que se aplican sus conclusiones y que debe considerarse como unificado? una república socialista, una monarquía parlamentaria, una república parlamentaria y varias repúblicas presidenciales?; el espacio iberoamericano de cooperaciòn puede seguir negociàndose en base a ellos por siempre y funcionar realmente bien en cuanto al alcance real y ejecución eficáz de sus objetivos, atentos requerimientos de nuestras sociedades en aras del bienestar general?; alcanza “hoy” con los meros principios “hasta hoy” propuestos en estas Cumbres, con la seriedad y efectividad que se requiere, atento los tiempos que corren y los nuevos desafíos impuestos por la globalizaciòn? habría realmente voluntad polìtica, como se requiere de llevar más allá esos meros principios para hacer frente a los desafìos de los nuevos tiempos?.- El tiempo que nos resta para la celebraciòn de la próxima Cumbre Càdiz 2012 debe servirnos, para reflexionar y buscar la mejor manera de llegar, a quienes corresponda como representantes de los países que integran el espacio Iberoamericano y Portugal, munidos de todo lo necesario para poder “ofrecer màs” a efectos de que el multilateralismo que sustenta a las mismas, sea realmente efectivo ante los signos de los nuevos tiempos.- Lo primero: no faltar a la cita; lo segundo, lograr que se constituya en màs que una mera presencia”.-
Ha llegado el momento de que España nuevamente como lo hiciera en la década de los ’80, encuentre los “puntos que hagan reaccionar a los países que integran el espacio que las Cumbres como foro de búsqueda de soluciones y ampliación de oportunidades aúnan y representan, logrando hoy, ir màs allà”; que se logre dar un paso fundamental: pasar de ser “conferencias” a una “verdadera comunidad” buscando así que sean más que foros de de cooperación y concentración, de meras actuaciones diplomáticas, actuando siempre sobre la base de aquello que los une; de los desafíos a seguir enfrentando ante el nuevo milenio” logrando que éstas palabras, no queden en sólo eso.-
DRA. SUSANA BEATRIZ FERRO ILARDO
ESTUDIOS LATINOS E IBEROAMERICANOS (SBFI)
FUMPADES ONG